¿Cómo elegir el césped para mi piscina?

¿Cómo elegir el césped para mi piscina?

Cada vez queda menos para que acabe el invierno y llegue la primavera, época perfecta para la puesta a punto de nuestro jardín e instalaciones de la piscina. Probablemente, el verano pasado pensaras en que le iba tocando el turno a cambiar el césped de la piscina, que con los años y los usos, su aspecto ha ido desmejorando.

La tarea de renovar el césped de la piscina es algo a lo que debemos prestar atención, si queremos ahorrar en su renovación, y por supuesto, si queremos que nos dure muchas temporadas. Por ello, queremos daros algunas recomendaciones para saber elegir el mejor césped para la piscina.

Cómo elegir el césped de la piscina.

Desde Tienda-Piscinas, nos aconseja que lo primero que debemos tener claro es si elegir césped natural o césped artificial. Esta decisión dependerá del uso que le vayamos a dar y el tiempo que le podamos dedicar. También es importante que tengamos en cuenta la climatología de la zona en la que vivamos.

Por qué elegir césped natural para la piscina

Obviamente, un césped natural bien cuidado es mucho más suave al tacto. Esto es algo que es de agradecer cuando nos tumbamos al sol sobre él. Además, el césped natural si lo tenemos bien cuidado, luce espectacular y es verdaderamente bonito. Pero para ello, no sirve cualquier tipo de césped natural. Existen alrededor de 10.000 clases diferentes, que dependerán del uso que vayamos a darle.

Cuando tengamos que elegirlo debemos tener en cuenta el tipo de suelo, así como el agua disponible para su riego, y el drenaje del suelo. La climatología también es importante, y tampoco debemos olvidar la cantidad y horas de sombra que hayan en la zona donde lo instalaremos.

También es importante tener en cuenta, que al instalarlo alrededor de nuestra piscina, esa zona tendrá exceso de humedad, y será sometido a pisadas y otras posibles agresiones como el cloro y otros productos químicos. Por lo que necesitaremos un césped natural que sea resistente.

Los expertos nos recomiendan comprar un césped que agrupe las semillas de ray-grass inglés, agrostis tenuis, poa pratensis y festuca rubra. Siendo esta, una mezcla equilibrada que requiere poco mantenimiento. Para poder plantarlo, necesitarás una capa de unos 20cm de tierra arenosa, que esté suelta para que el césped se asiente con fuerza. A la hora de regarlo, debemos ser consientes de que no le falte nunca agua, pero tampoco regarlo demasiado, ya que podríamos ahogar las raíces y provocaríamos hongos. El mejor momento para hacerlo es siempre por las mañana o al atardecer, evitando las horas más calurosas del día, que provocarán la evaporación del agua.

Por qué elegir césped artificial para la piscina

Optar por el césped artificial también tiene sus ventajas. Aunque debemos tener en cuenta muchos aspectos como su nula capacidad de regeneración, y que cuando se deteriore deberemos cambiarlo. Las zonas del césped expuestas al sol se calientan más y suelen desgastarse antes, por lo que el ritmo de renovación será más frecuente.

Sin embargo no todo son problemas con el césped artificial. Una vez que lo instales, no necesita ningún tipo de mantenimiento, y con él ahorrarás tanto tiempo como agua, y abono, no necesitas cortarlo cada cierto tiempo. Su único mantenimiento es lavarlo con una manguera y cepillarlo, cada ciertos días. Por muchas inclemencias meteorológicas que se produzcan, siempre estará en buen estado, tanto si hace frío como si hace mucho calor. Lo mejor es su durabilidad, ya que podemos usar el mismo hasta 10 años seguidos. Es ecológico, puesto que para su mantenimiento no necesitamos fertilizantes.

 Además, en el mercado hay muchos tipos de césped artificial, algunos de ellos parecen verdadero césped artificial.

¿Cómo elegir el tipo de césped artificial?

Uno de los aspectos que debemos tener en cuenta a la hora de comprarlo es que no todos tipos de césped artificial son aptos para todos los emplazamientos. A la hora de elegirlo, debemos tener en cuenta (como en el caso anterior) la resistencia al cloro y los productos químicos, que vertemos en la piscina, que influirán en la coloración de sus fibras. Es importante que sea antideslizante, para evitar resbalones y accidentes cuando esté mojado. El drenaje es otro aspecto al que debemos prestar atención a la hora de elegir el césped artificial, si queremos evitar que se generen charcos por toda la zona la piscina. A pesar de que hemos comentado, que el césped artificial no tiene capacidad de regeneración, sí la tiene de recuperación de las fibras. Esto quiere decir, que tras retirar tu piscina o los muebles de terraza que has puesto sobre el, las fibras volverán a su estado anterior, aunque esto dependerá de la calidad del césped artificial que compremos.

Otro aspecto, que merece la pena tener en cuenta a la hora de elegir el césped artificial, es su capacidad ignífuga. Así evitaremos tener accidentes indeseados durante las barbacoas en la piscina.

Tipos de césped artificial

Hoy en día en el mercado podemos encontrar una gran gama y tipologías de césped artificial, con diversas calidades, usos, tactos… que cumplen perfectamente con todas nuestras necesidades y las de nuestro jardín. Por ello, en función de nuestras preferencias, podremos encontrar los siguientes tipos:

-          Césped artificial para piscinas y jardines, que tengan mucho tránsito y sea muy usado y pisado, que requieren de resistencia. Deberemos elegir un césped artificial de densidad alta.

-          Si tenemos mascotas en casa, necesitaremos aquel con mayor capacidad de drenaje.

-          Si en casa hay niños, vamos a necesitar un césped artificial que sea suave para que los pequeños no se hagan daño. También los hay con base amortiguadora.

Gracias a todas estas cualidades, los propietarios de las piscinas (la mayoría) tienen claro, que prefieren el césped artificial gracias a sus muchas bondades y comodidades. Sin embargo, si vives en una zona con un clima lluvioso en la que pueda mantenerse fácilmente el césped natural, este también es una opción muy interesante.